"Nunca querrás convertirte en la última víctima del Zika, el síndrome de Guillain Barre, el dengue o el chikungunya, así que cúbrete, tómate un tiempo y haz algo de limpieza". Pegajoso, melódico y acompañado de los dulces sonidos de la percusión de acero, suena como el inicio de un calipso interesante, pero una conversación con el cantante revela que es mucho más que eso. Es un jingle, es una llamada de atención para el oyente, lo más importante es que es una lección a la que hay que prestar atención. Ajamu es un nombre de origen africano/nigeriano que significa "un hombre que lucha por lo que quiere", por lo que no debe sorprender que Edson Mitchell, mejor conocido como Ajamu, luchara por su vida. El nueve veces rey de Calypso de Granada fue una de las personas infectadas con el virus Zika que posteriormente desarrolló el síndrome de Guillain-Barre.Según la Clínica Mayo, el síndrome de Guillain-Barré es un trastorno poco frecuente en el que el sistema inmunológico del cuerpo ataca los nervios. La debilidad y el hormigueo en las extremidades suelen ser los primeros síntomas. Estas sensaciones pueden diseminarse rápidamente y, finalmente, paralizar todo el cuerpo".La Clínica Mayo afirma además que “la causa exacta del síndrome de Guillain-Barré es desconocida. Pero a menudo es precedido por una enfermedad infecciosa. No hay cura conocida. La mayoría de las personas se recuperan del síndrome de Guillain-Barré, aunque algunas pueden experimentar efectos persistentes, como debilidad, entumecimiento o fatiga".El 16 de agosto de 2017 es una fecha que Ajamu nunca olvidará, ya que fue cuando cayó enfermo, pero a decir verdad, se había sentido mal antes de eso. Diariamente sentía fuertes dolores de cabeza que iniciaron en marzo o abril, simplemente tomó medicamentos y pensó poco en ello. Programado para actuar en Toronto a mediados de agosto, reservó un vuelo a Canadá. El día del vuelo se despertó temprano, como la mayoría de los viajeros, pero no prestó atención a la sensación extraña en sus manos. Sin embargo, era una señal de lo que vendría, ya que se encontró en el aeropuerto con sus pantuflas, un error inusual que debería haber indicado que algo estaba mal, pero simplemente se echó a reír.Fue durante el vuelo cuando experimentó lo que describió como "el peor dolor de cabeza de mi vida" cuando tomó la decisión de ver a un médico. Para ese momento ya era demasiado tarde, cuando el avión aterrizó tuvo que ser hospitalizado ya que sus piernas ya no soportaban su cuerpo. Esta primera hospitalización fue seguida por dos períodos más cuando fue dado de alta a pesar de tener una presión arterial muy alta. Fue su esposa Lucy quien vino a Toronto y lo llevó de regreso a su hogar en Virginia, a pesar de que se consideraba riesgoso para él volar. Después de dos días y una cantidad de pruebas, Ajamu finalmente tuvo su diagnóstico. Fue el síndrome de Guillain-Barré. Esta era una enfermedad que nunca había escuchado, así que fue su hija, una enfermera, quien investigó un poco y lo educó.Casi dos años después, todavía se pone sentimental cuando habla de eso porque hubo una noche particularmente difícil en la que esencialmente se rindió. Él asegura que no estaría aquí hoy si no fuera por la gracia de Dios y el apoyo de su "bendición más grande", Lucy.Ajamu ha recuperado completamente su movilidad, sin embargo, está experimentando los efectos persistentes. Se fatiga fácilmente y su memoria y vista nunca regresaron realmente a sus estados anteriores. Él también nota que su sonrisa no es la misma. La buena noticia es que su mayor temor no llegó a suceder y puede utilizar plenamente sus manos, ya que todas sus habilidades de motricidad fina han regresado. De hecho, los miembros de su banda dicen que él es un mejor músico ahora que antes. Puede sonar extraño para algunos, pero para este ingeniero de sonido y músico autodidacta, la vida en una silla de ruedas hubiera sido preferible a la vida sin la capacidad de tocar música. Él dice: "No sé cómo sería mi vida si no pudiera volver a tocar música". A pesar de que ahora está de regreso con sus amados instrumentos, no está recuperado al 100% como esperaba. Las temperaturas frías lo afectan, por lo que debe tener esto en cuenta ahora al programar sus actuaciones.Acceder a una solicitud para cantar un jingle para la Cruz Roja de Granada para ayudar en la lucha contra el mosquito Aedes Egypti no fue difícil para él, ya que hacer música es lo que hace. El hecho de que lo llevara un paso más allá y grabara un video para crear conciencia, (su sugerencia) sobre el cambio de comportamiento necesario es algo sorprendente. “Mi mayor amor es para Dios y la humanidad. Dios es la humanidad", es el razonamiento que él ofrece. Si uno mirara a la humanidad a través de la lente de la Cruz Roja, su motivación se alinea perfectamente con el primer principio fundamental. Que no deseara su experiencia ni a su peor enemigo y que haría cualquier cosa para evitar que le sucediera a otra persona, refleja el deseo de prevenir y aliviar el sufrimiento humano y proteger la vida y la salud.La perspectiva de Ajamu sobre su experiencia es una que le recuerda un dicho de su abuela que dice: "es mejor encender una vela que maldecir la oscuridad". En lugar de lamentarse por las cartas que le tocaron, elige difundir un mensaje. Él cree que es su responsabilidad educar a las personas, que este es su propósito, la razón por la que todavía está aquí. La Agencia de Salud Pública del Caribe (CARPHA) predice que el Caribe verá un retorno del dengue, que también se propaga por el mosquito Aedes Egypti, en un futuro cercano y Erin Law, Asesar Global de Zika, explica que de estas enfermedades, el Zika, el dengue y chikungunya, "son cíclicas, y que se espera que haya un nuevo brote", por lo tanto debemos estar preparados. Ajamu espera que si la gente puede aprender algo de su experiencia sea no dar nada por sentado, porque la vida es muy frágil. Alentó a los granadinos y personas del Caribe a minimizar las oportunidades para que el mosquito se reproduzca a pesar de que "los mosquitos y los humanos tienen que coexistir", dice con una sonrisa.Mira el video aquí.
La Sociedad de la Cruz Roja de Granada (GRCS) está trabajando actualmente en treinta y dos comunidades en Granada para educar a la población y crear conciencia sobre las enfermedades transmitidas por mosquitos, como el Zika, el dengue y la chikungunya. No es una tarea fácil, ya que el equipo es pequeño. Sin embargo, lo hacen ya que reconocen la importancia del trabajo que realizan.Avion Baptiste, facilitadar comunitaria con el Proyecto de prevención de enfermedades transmitidas por vectores, disfruta ver "la alegría y la satisfacción en los rostros cuando realizas una actividad o compartes información que la gente encuentra útil". Avion es alegre y está llena de entusiasmo, por lo que no es una sorpresa que también le encante "trabajar con la comunidad para que puedan ver en qué pueden convertirse con nuestra ayuda".Informada. Comprometida. Empoderada. Son características de las comunidades después de interactuar con la Cruz Roja de Granada. Como evidencia esta el hecho de que la comunidad de Bellevue ha establecido un comité directivo para abordar las cuestiones planteadas por los miembros de la comunidad. El gerente del Proyecto de Prevención y Respuesta al Zika en el Caribe, Abdul Nasir Khan, quedó muy impresionado por este hecho en su visita de campo. "Increíble" fue la forma en que describió una presentación del mural realizado por los residentes de Bellevue en respuesta a una evaluación de sus necesidades de salud. A pesar de que hay mucha división en Bellevue y muchos de sus residentes no están de acuerdo, el comité está decidido a trazar una ruta para avanzar.Mon Toute es otra comunidad en Granada que ha sentido el efecto de la Cruz Roja y la persistencia de su Equipo Zika. Es un lugar donde se les recomienda a los turistas no entrar debido al alto crimen y las drogas. También es un área que estaba experimentando serios problemas con el vertido de basura. Sin embargo, después de la intervención de la Cruz Roja, el terreno se limpió y se transformó en una solución útil; actualmente se está utilizando para plantar productos. Las consecuencias de la acumulación de basura fueron más allá de las preocupaciones ambientales y de salud, también causaron contención en la comunidad. Un señor que al principio se negaba a salir y participar en la actividad de limpieza declarando que "¡la gente es demasiado desagradable!", fue convencido por los voluntarios para colaborar. De hecho, asumió una posición de liderazgo y se convirtió en el cerebro del esfuerzo.El fenómeno que ocurrió en La Tante es quizás un testimonio final sobre el impacto de la Cruz Roja de Granada. Cuando los oficiales de campo realizaron su evaluación inicial, los jóvenes de La Tante se acercaron a ellos y les pidieron que regresaran y les brindaran información y educación sobre temas de salud que afectaban a su comunidad en especifico. El equipo facilitó esta solicitud y, debido al tamaño de la comunidad, hicieron dos presentaciones sobre el Zika, el cáncer de próstata y los signos de un ataque cardíaco.Bellevue, Mon Toute, La Tante, lugares con nombres que hablan de la historia de Granada pero que están experimentando los problemas de los tiempos modernos. Es un buen augurio entonces que todos ellos tengan residentes que están decididos a hacerlo mejor y a ser mejores. Este deseo de mejora no se limita a las evaluaciones y presentaciones. En cambio, con el apoyo de la Cruz Roja de Granada, estos residentes y los de las otras veintinueve comunidades, desarrollarán un plan de acción que identifique los pasos que deben dar para abordar sus problemas y asegurar su futuro.
Estos dos hermanos tienen todo en común, las diferencias más pequeñas como ellos lo dicen, como el estilo de su peinado no sirve de mucho a la hora de identificarlos, si uno se descuida, ya está hablando con el otro, basta que decidan cruzarse por alguna razón para crear la confusión. Incluso ellos mismos no saben si el uno es o fue Walmer o Wlater, puesto que cuando nacieron sus cunas estaban identificadas y constantemente al devolverles a la cuna no sabían si la habían puesto en la correcta.
Su historia está llena de coincidencias, lo comparten todo, alguien dice que no son gemelos sino siameses, pues hacen todo juntos, estudian lo mismo y en el tiempo libre dedican su tiempo a la institución que según ellos, les está brindando la oportunidad de ayudar a quienes más lo necesitan. Combinan sus estudios de medicina con la noble vocación del voluntariado en la seccional de Barinas de Cruz Roja Venezolana.
Walmer cree que el haber creado lazos de amistad y confraternidad con sus amigos voluntarios y la comunidad, le ha permitido entender mejor las necesidades más urgentes de las personas vulnerables. Su mayor sueño es graduarse de médico y volcar sus conocimientos hacia las personas que viven en comunidades con necesidades de atención de salud.
Walter mientras habla su hermano sonríe, la alegría es porque sabe que cuando sean profesionales de la medicina, seguramente irán también juntos a cumplir su noble misión de salvar vidas no solo como profesionales sino también como voluntarios de la Cruz Roja Venezolana.
Su familia está feliz, porque saben de la labor social que realizan, les motiva a sus padres saber, que no solo aprenden en la universidad en su carrera de, sino que se nutren de conocimientos y capacitaciones muy importantes proporcionadas por la Cruz Roja Venezolana. Saben que hay días en que no los van a ver, pues con entusiasmo preparan incluso fines de semana su mochila para ir como voluntarios a prestar ayuda a quienes más lo necesitan.
Historias como las de Walmer y Walter motivan también a sus compañeros voluntarios porque predican con el ejemplo su compromiso de salvar vidas sin esperar nada a cambio.
Desde el cálido y entrañable oriente venezolano llegó a Perú un grupo de vecinos del estado de Anzoátegui, Venezuela. Karen, la autora de la idea de migrar en caravana, comenta entre risas “Hace unas semanas, toqué la puerta de cada uno de ellos y les dije que teníamos que irnos juntos a buscar un nuevo futuro, que en otro país podíamos comenzar nuestra nueva vecindad”. No pasó más de dos días y Carmen, Yerida, Irene y ella decidieron vender todo lo poco que tenían para poder comprar un pasaje hacia Cúcuta, después de eso todo era incierto. Ellas cuentan que la necesidad y la falta de alimento hicieron que no importe abandonar sus casas en Barcelona, Anzoátegui y decidir buscar un nuevo camino fuera de Venezuela. “Nos estamos yendo todos, mis hijos y mis vecinas, lo demás ya no es importante” comenta Irene después de secarse las lágrimas. “Si usted supiera todo lo que ha pasado este grupo de vecinos; hemos caminado bajo el aguacero, hemos sentido un frío al que no estábamos acostumbrados, hemos comprendido lo que significa tener un par de buenos zapatos para poder hacer un viaje tan largo; pero mírenos ahora, estamos sanitos en Perú” subraya.
A pesar de haber dejado atrás una vida, los vecinos “Brisas de amor” como se hacen llamar, cuentan que nunca se dejaron ganar por la amargura o la tristeza y que, si hasta el día de hoy mantienen su fortaleza es porque descubrieron que unidos pueden más. “Ni siquiera el peso de las 12 maletas que cargamos nos van a vencer” asegura Yerida mientras enseña sus bolsos.
Viajar en equipo les ha permitido sentirse más seguros y protegidos. Hoy, los vecinos han pasado por el control de vacunación en el Centro Binacional de Atención en Frontera, CEBAF, y comentan entre risas, cómo entre todos se dan ánimos para no pensar en las inyecciones. Irene, la mayor de la tropa con 42 años, hace una pausa a la risas y explica lo importante que es para ellos cuidar de su salud. “Hasta uno de los guerreros más pequeñitos del grupo, con tan solo 5 años, nos cuida y cada vez que encuentra por la calle una posta médica nos dice para entrar y es que es verdad, si no tenemos salud, no podremos llegar a nuestro destino final, la ciudad de Lima”. En una oportunidad, llegando a Quito, el hijo mayor de Karen, con de 19 años, sintió cólicos estomacales y ese frágil problema no les permitió seguir avanzando. Cuentan que en ese momento decidieron tener un pacto como equipo: si uno de ellos se enfermaba, todos tenían que protegerlo y así nunca dejar de lado a ningún miembro de la vecindad.
La hija de Yerida de 11 años, se atreve a hablar y cuenta que en las carreteras, cuando les toca caminar por largas horas, mucha gente les grita desde los autos “¡Fuerza Venezolanos, no se cansen!”, y que esas palabras siempre alientan a todo el grupo. En ese momento, Carmen saca de su billetera un papel escrito a mano donde se lee “Nunca deben rendirse, juntos van a salir adelante”. Ella comenta que esa nota se los entregaron los voluntarios de la Cruz Roja en Bucaramanga y que hasta el día de hoy los usan para darse ánimos. “Estamos en Perú y hasta ahora los guardo para momentos especiales como este”.
22 de setiembre de 2020.- Ante el incremento de actividad que ha presentado el volcán Sangay desde la madrugada del 20 de setiembre, la Cruz Roja Ecuatoriana ha activado el Protocolo de Acción Temprana (PAT) con fondos de emergencia de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (IFRC), que le permitirá asistir de manera inmediata a 1,000 familias en las comunidades rurales que están siendo más afectadas.“Las primeras acciones han sido que nuestros voluntarios en Chimborazo, Bolívar y Guayas participen en los Comités de Operaciones de Emergencia locales. Desde las Juntas Provinciales se activaron equipos de voluntarios para la evaluación de daños y análisis de necesidades. En Bolívar, una de las provincias más afectadas, se procedió a la entrega de insumos como mascarillas”, comenta Roger Zambrano, Coordinador Nacional de Gestión de Riesgos y Atención en Emergencia y Desastres de la Cruz Roja Ecuatoriana.Debido al umbral de depósito de ceniza, la Cruz Roja Ecuatoriana entregará mil kits de salud familiares, que consisten en mascarillas N95 y gafas de protección ocular para adultos y niños; mil kits de protección animal , que consisten en lonas de plástico y herramientas para que las comunidades puedan proteger a sus animales y/o sus cultivos. Asimismo, se activará el Programa de Transferencia en Efectivo mediante la entrega de tarjetas de débito de IFRC.Desde el 2019 el PAT permite que la Cruz Roja Ecuatoriana pueda acceder a fondos para estar preparada y pre-posicionada frente a un evento de esta naturaleza y poder realizar acciones tempranas de manera inmediata. El objetivo es establecer acciones tempranas adecuadas, utilizando pronósticos de dispersión y deposición de cenizas volcánicas, que permita realizar acciones para proteger a las familias más vulnerables y sus medios de vida en las áreas más potencialmente afectadas por las cenizas volcánicas.Con este tipo de intervenciones, se busca comprender mejor el comportamiento de los riesgos a desastres, prevenir sus impactos de ser posible, y reducir el sufrimiento y pérdidas humanas. “No podemos prevenir la ocurrencia de los peligros naturales, pero sí utilizar la información disponible para anticiparnos a sus consecuencias siempre que sea posible”, añade Inés Brill, jefa de la Delegación para los Países Andinos de IFRC. “La acción temprana y la preparación efectiva pueden salvar a la población y a sus medios de vida”.
Santo Domingo, 10 de julio 2020 – La Federación Internacional de Cruz Roja y la Media Luna Roja (FICR) envió a finales de junio artículos de socorro desde la República Dominicana a Haití, a través de un corredor humanitario. La operación, activada en el contexto de la respuesta de COVID-19, beneficiará a 2.000 personas vulnerables en Haití.Junto con la Cruz Roja de Haití, la Cruz Roja Dominicana, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y con financiación de la Oficina Europea de Protección Civil y Operaciones de Ayuda Humanitaria (ECHO) y del Gobierno de Bélgica, la FICR ha desarrollado un modelo logístico para responder rápidamente a las emergencias en el Caribe, especialmente en Haití. El modelo forma parte de una estrategia más amplia para crear "Corredores humanitarios del Caribe" y preposicionar reservas de suministros esenciales - como kits de higiene, kits de refugio, lonas, bidones - que puedan trasladarse inmediatamente después de una emergencia en la región, sobre todo durante la temporada de huracanes.Gracias al apoyo de la Cruz Roja Dominicana, la FICR ha podido almacenar artículos de emergencia en la República Dominicana y enviarlos a Haití para responder a las necesidades urgentes de las personas más vulnerables. El 26 de junio de 2020, se entregaron 400 kits de higiene en Puerto Príncipe para apoyar la política de permanencia en el hogar, como parte de la respuesta de COVID-19, que benefició a un total de 2.000 personas.El Presidente de la Cruz Roja de Haití, Dr. Jean-Pierre Guiteau, declaró: "Desde 2019, dado el deterioro de la situación de seguridad en Haití como resultado de las tensiones sociopolíticas, habíamos estado pensando en un corredor humanitario que permitiese el transporte de suministros humanitarios y facilitara la evacuación urgente de los pacientes que necesitaran un tratamiento que no estuviera disponible en Haití. Desde entonces - junto con el Presidente de la Cruz Roja Dominicana, así como con representantes de la FICR y de las Naciones Unidas - desarrollamos aún más la idea, que se tradujo en medidas concretas adoptadas durante la crisis del coronavirus. La FICR pudo enviarnos kits de higiene utilizando este corredor. El corredor humanitario es, sin duda, una herramienta muy útil, que debe ser perfeccionada y respaldada por Haití y la República Dominicana en beneficio de ambos países durante las emergencias".Raphael Hamoir, Coordinador de Gestión de Desastres de la FICR y encargado de las operaciones en Cuba, República Dominicana y Haití, declaró: "Esta operación no es muy amplia en cuanto a la magnitud de la entrega, pero es significativa en cuanto a las asociaciones establecidas. Gracias al apoyo binacional de la Cruz Roja de Haití y la Cruz Roja Dominicana, y gracias a nuestra colaboración con el PMA, hemos podido trasladar las existencias de la República Dominicana a Haití y ayudar a las familias vulnerables, en el contexto de la respuesta de COVID-19".El modelo se ha desarrollado a lo largo de los años como parte de los planes de preparación para desastres, y se activó durante la pandemia de COVID-19. "En el actual contexto de COVID-19, con un solo huracán que tocase tierra podría producirse una situación muy difícil en el Caribe. A través del establecimiento de corredores humanitarios, estamos aumentando el número de opciones para la obtención de ayuda donde más se necesite", añadió Raphael Hamoir.
Ginebra, 26 de marzo de 2020 –-El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Movimiento) emite hoy un llamamiento de emergencia revisado por 800 millones de francos suizos (823 millones de dólares estadounidenses) para ayudar a las comunidades más vulnerables del mundo a frenar la propagación de COVID-19 y recuperarse de sus efectos.Si bien ya estamos ante una pandemia mundial, aún es posible disminuir la circulación de la enfermedad y el número de vidas que se cobra mejorando el acceso a recursos esenciales.Tal como señala el presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Federación Internacional), "esta pandemia pone en riesgo sistemas sanitarios en su totalidad, y la situación será peor allí donde esas estructuras sean débiles o inexistentes. Es fundamental dar una respuesta comunitaria sólida para detener el virus. Aunque la enfermedad afecta a todos por igual, las personas migrantes y desplazadas, las que no tienen hogar y las que viven en zonas propensas a desastres están entre las más expuestas al contagio, las que menos capacidad tienen de acceder a la atención de salud y las más afectadas por la pérdida de ingresos. No debemos olvidarlas. Debemos intensificar el apoyo a nuestros/as voluntarios/as de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja que están en la línea del frente de esta respuesta."El Movimiento está compuesto por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), la Federación Internacional y las 192 Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Sociedades Nacionales).- La Federación Internacional solicita 550 millones de francos suizos (566 millones de dólares estadounidenses) para apoyar a las Sociedades Nacionales en atención sanitaria, preposicionamiento de existencias, comunicación de riesgo, aprendizajes de la red mundial de personal de respuesta local, subvenciones monetarias para familias y mitigación del impacto de brotes a gran escala. De esos 550 millones de francos suizos, 150 se destinarán al apoyo de la Federación Internacional a las Sociedades Nacionales que más lo necesiten, mientras que los 400 restantes los recolectarán a nivel nacional las Sociedades Nacionales.- El CICR solicita 250 millones de francos suizos (256 millones de dólares estadounidenses) para responder en lugares de conflicto y violencia, colaborar con instalaciones médicas y lugares de detención, limitar la transmisión entre personas desplazadas y detenidas, procurar que estas tengan acceso a servicios sanitarios y apoyar a las Sociedades Nacionales en su respuesta.En palabras del presidente del CICR, Peter Maurer: “Hoy, la comunidad internacional debe aumentar su apoyo a las comunidades con recursos insuficientes, asoladas por conflictos. De lo contrario, corremos el riesgo de que estalle otra catástrofe humanitaria que se sumaría a los innumerables sufrimientos que han tenido que soportar estas poblaciones tan castigadas por las guerras. Los virus no conocen fronteras; estamos frente a un problema mundial que solo puede resolverse mediante acciones mundiales."Entre los esfuerzos que ya está emprendiendo el Movimiento se incluyen el apoyo a las Sociedades Nacionales para aumentar sus servicios de salud, la interacción con las comunidades y las actividades de preparación frente a la pandemia para poblaciones vulnerables. Por ejemplo, el refuerzo de insumos en instalaciones médicas, la ampliación de los programas sanitarios y de prevención de enfermedades, incluso en lugares de detención, y la mitigación del impacto socioeconómico del brote mediante la preservación del acceso a servicios básicos por parte de las comunidades. También se prestará apoyo a los Estados en la aplicación de las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la detección temprana de COVID-19, el aislamiento y tratamiento de casos, así como el rastreo de contactos.Ambas organizaciones advierten que contener el rápido avance de la pandemia en todo el mundo exige un enfoque coordinado y de toda la sociedad que incluya financiamiento y apoyo en los planos locales y nacionales. Los efectos de la enfermedad por COVID-19 se sentirán en todas partes, pero las personas más vulnerables son las que corren el mayor riesgo. Los Gobiernos, las personas, las comunidades, las instituciones y los donantes deben trabajar conjuntamente en todos los niveles para mitigar los efectos devastadores de la crisis sanitaria.El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja es la red humanitaria más grande del mundo. Sus voluntarios/as y empleados/as, desde las comunidades, ayudan a las personas más vulnerables del mundo, entre ellas, las que viven en países donde los sistemas de salud y seguridad social no cuentan con recursos suficientes; las personas que se recuperan de desastres recientes; las personas migrantes y desplazadas; quienes se encuentran en zonas de conflicto y viven en medio de una violencia constante; los habitantes de barrios marginales de las ciudades; las personas detenidas; y quienes padecen las consecuencias socioeconómicas de la pandemia.
Nuestra visión es que las comunidades de todo el mundo sean más resistentes y estén mejor preparadas para los impactos de los peligros naturales, ahora y en el futuro. Descubra los recursos, las herramientas y la orientación que hemos elaborado para ayudar a nuestra red y a nuestros socios con su trabajo en la reducción del riesgo de desastres climáticamente inteligente.
Nuestra extensa red de más de 197.000 filiales locales garantiza que la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (IFRC) permanezca firmemente arraigada en las comunidades locales.
El mundo se enfrenta a problemas humanitarios y de desarrollo cada vez más frecuentes y complejos. Para abordarlos, necesitamos la acción coordinada de una amplia gama de actores, incluido el sector privado.
La Federación Internacional apoya a nuestras 191 Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja de todo el mundo para que desarrollen todo su potencial como agentes humanitarios locales eficaces. Estamos comprometidos a apoyar su desarrollo y programas a largo plazo. Y adaptamos nuestro apoyo a los contextos, necesidades y prioridades de cada Sociedad Nacional.