España

Displaying 1 - 3 of 3
| Artículo

En conjunto podemos #DerrotarElCalor

¿Sabía que las olas de calor son cada vez más frecuentes, largas, calurosas y mortales debido al cambio climático? Cada año, millones de personas corren peligro de contraer enfermedades relacionadas con el calor y se cobran la vida de miles de personas. Pero las amenazas que plantean las olas de calor pueden prevenirse. Las medidas que podemos tomar para protegernos del calor extremo son sencillas y asequibles. ¿Qué es una ola de calor? Una ola de calor es un periodo prolongado de temperaturas inusualmente altas y, a menudo, de elevada humedad. Las definiciones exactas de ola de calor pueden variar de un país a otro en función de las temperaturas y condiciones normales del clima local. Las olas de calor pueden provocar golpes de calor, deshidratación y enfermedades graves. Las olas de calor también suponen un alto riesgo para las personas con enfermedades cardiovasculares y respiratorias crónicas. Las personas que viven en ciudades suelen ser las más afectadas por las olas de calor porque las zonas urbanas suelen ser más calurosas que el campo. ¿Qué debería hacer para prepararme ante una ola de calor? En la mayoría de los lugares podemos predecir con fiabilidad las olas de calor, por lo que suele haber tiempo para prepararse. No pierda de vista la previsión meteorológica local y recuerde lo siguiente: Beba mucha agua, aunque no tenga sed. Evite estar al sol. Busque la sombra o un espacio interior fresco siempre que sea posible. Consejo: puede utilizar persianas o materiales reflectores en las ventanas para ayudar a mantener el calor fuera de casa. Use ropa holgada, ligera y de colores claros Compruebe que su familia, amistades y vecindario están bien, sobre todo si son personas adultas mayores o no se encuentran bien. Coma lo suficiente, idealmente porciones más pequeñas y frecuentes. Preste atención a los síntomas de la enfermedad inducida por el calor (falta de aire, dolor en el pecho, confusión, debilidad, mareos o calambres) y busque ayuda médica si es necesario. Vea este breve vídeo para obtener más información o visite nuestra página dedicada a las olas de calor para obtener más consejos. Inspiración de las Sociedades Nacionales para#DerrotarElCalor El pasado mes de junio, en Satmatha, Bangladesh, un equipo voluntario de la Media Luna Roja de Bangladesh montó un escenario en pleno centro de la ciudad donde ofreció creativas actuaciones públicas inspiradas en el calor, con motivo del Día de Acción contra el Calor 2022. Desde la poesía a la comedia, pasando por la danza y el teatro, las personas voluntarias actuaron con todo su corazón -todo en dialectos locales- para captar la atención de la gente y enseñarles todo sobre los riesgos del calor. Sus actuaciones causaron tanto revuelo que aparecieron en las noticias nacionales impresas y digitales, ¡difundiendo aún más el mensaje de cómo #DerrotarElCalor! Aquí puede ver algunos vídeos de sus actuaciones. En la ciudad de Kandi, en Bengala Occidental, India, personas voluntarias de la Cruz Roja India salieron a la calle el año pasado cuando las temperaturas se dispararon. Durante una fuerte ola de calor que azotó la región, instalaron puntos de agua potable purificada en su sucursal, en las paradas de autobús y en el exterior de los hospitales para que las personas pudieran rehidratarse en esas difíciles condiciones. Se dieron a conocer con grandes sombrillas de colores y barriles gigantes de agua, y llevaron sombra, refresco y sonrisas a su comunidad local. En España, la Cruz Roja Española tiene una larga historia de apoyo a las comunidades de todo el país para mantenerse a salvo durante el calor del verano. Los equipos voluntarios realizan una gran labor de divulgación - a través de las redes sociales, llamadas telefónicas y movilización en las calles- para compartir consejos sobre cómo mantener la frescura. También asisten a las personas mayores y con enfermedades crónicas, que corren un riesgo especial cuando suben las temperaturas. Y en algunas regiones, se aventuran en sus comunidades en días muy calurosos para repartir agua, abanicos de papel y gorras. El calor extremo no sólo pone en peligro la salud de las personas, también puede afectar gravemente a sus medios de subsistencia. En Uruguay, los prolongados periodos de calor extremo y la falta de lluvias han provocado sequías que están causando enormes daños a la agricultura. Para ayudar a las comunidades a hacer frente a la situación, las personas voluntarias de la Cruz Roja Uruguaya han estado compartiendo información sobre cómo la gente puede protegerse a sí misma y a su ganado durante las olas de calor. Con el apoyo del Fondo de Reserva para la Respuesta a Desastres (DREF) de la IFRC, también proporcionan agua y protector solar y ofrecen asistencia en efectivo a las familias más afectadas. Más información aquí. Recursos útiles para saber más sobre el calor Guía sobre la ola de calor en la ciudad para las filiales de la Cruz Roja y la Media Luna Roja Calor extremo: Prepararse para las olas de calor del futuro - informe conjunto de la IFRC, el Centro del Clima de la Cruz Roja y la Media Luna Roja y la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCAH) Kit de herramientas sobre el calor- una colección de carteles, recursos de medios sociales y vídeos sobre olas de calor producidos por el Centro Mundial de Preparación para Desastres.

Leer más
| Artículo

Apoyo a las personas sin hogar en España: Los voluntarios y voluntarias de la Cruz Roja Española ofrecen un cálido abrazo en las frías noches de invierno

Las cuatro velas que reinan sobre una desvencijada mesa son la calefacción y la iluminación de la infravivienda, que es como ahora se llama a las cuatro paredes que se sostienen de milagro y entre las que viven, o lo intentan, Sonia y José Antonio. Como iluminación, las velas cumplen su cometido, al menos para el minúsculo espacio vivienda. Como calefacción, las velas no dan la talla: fría noche de 6 grados fuera, y dentro. Los repetidos tosidos secos de Sonia, de 38 años, son otra consecuencia de la falta de calor. El frío se te mete hasta los huesos. “Le tendrían que dar una tarjeta VIP en el hospital”, bromea José Antonio, mientras enumera la lista de afecciones pulmonares de ella. Son pareja desde hace cuatro años, casi los mismos que llevan entre estas cuatro paredes en medio de un solar que, en su día, llegó a ser una importante fábrica de carrocerías para camiones a las afueras de Alcalá de Henares, Madrid. Esta noche, como tantas otras, reciben la visita de Juani y de Basilio, dos voluntarios de los equipos de atención a personas sin hogar de Cruz Roja. Han traído algo de comida, como intuyen los dos pequeños cachorros de mastín que no paran de buscar los mimos de los voluntarios. “Vamos, baja de ahí”, reprende José Antonio a uno de los mastines callejeros, “no tenéis que ser cariñosos, debéis defender el hogar”, se lamenta. Hace poco que les robaron un generador y, con él, el calor. Los voluntarios de Cruz Roja asesoran a la pareja sobre algunas ayudas que pueden recibir y otros trámites administrativos para acceder a las mismas, pero, sobre todo, comparten su tiempo. “Nuestra principal labor es escuchar, que se abran. Imagina que vives solo, en la calle, y que no tienes a nadie con quien hablar desde que te levantas y hasta que te acuestas”, destaca Basilio, ex militar, que cumple ahora 2 años de voluntario en este programa de Cruz Roja. La ruta de Juani y Basilio los lleva ahora a los vestuarios no acabados de una instalación deportiva del municipio. No hay ventanas, ni puertas, ni luz, ni agua. El actual ‘inquilino’, Javier, llega poco después en bicicleta. A la luz de los teléfonos móviles, caminando entre los escombros, se ven colchones rotos, ropa desechada y latas de comida vacías. Pero empiezan las risas. Javier se ha echado novia y enseña orgulloso fotos de ella en su móvil a los voluntarios Juani y Basilio. Está muy contento con ella. Su anterior novia le pegaba. "Ese es el principal problema, las dependencias que arrastran muchas de las personas con las que trabajamos y la violencia que las acompaña", señala Basilio. La ruta nocturna de Juani y Basilio les lleva después a una vieja nave de un polígono industrial de Alcalá. Allí volverán a echarse unas risas y unas bromas con Moisa, de 68 años y origen rumano. Moisa ha conseguido convertir el viejo almacén en algo parecido a un hogar. Incluso tiene un televisor en el que ve películas de vaqueros, de las antiguas, las que a él le gustan. Mientras se enciende un cigarrillo, ante la mirada desaprobadora de Juani y Basilio, empiezan a hablar de lo divino y lo humano y rápidamente pasan de la política a temas más ligeros, como la cantante Carla Bruni. Tras dejar algo de comida y otros enseres, Basilio y Juani emprenden el viaje de vuelta a la sede de la Cruz Roja en Alcalá. Están un poco tristes, dicen. Hace poco perdieron a un amigo de la calle. Un "familiar", le llaman. Porque, para ellos, todos son como de la familia. "Al menos no murió en la calle, pudieron llevarlo al hospital y falleció en una cama", subraya Basilio. "A pesar de todo, hay que seguir adelante, no podemos llevarnos los problemas a casa y dejar que las situaciones que vivimos nos rompan; yo puedo ayudar si estoy bien, si sonrío", dice Juani, que en el pasado pasó un tiempo de baja cuando falleció otra persona a la que apoyaba. Apoyo integral a las personas sin hogar Juani y Basilio son dos de los más de 5.000 voluntarios de Cruz Roja Española que trabajan con personas sin hogar en España. Para ello, Cruz Roja Española dispone de 77 Unidades de Emergencia Social (UES) en cerca de 40 provincias. Además, ofrece 800 plazas en alojamientos temporales para momentos críticos y gestiona 31 centros de día en los que ofrecen duchas, lavandería o servicio de comedor cuando es necesario. Como parte de una red más amplia de organizaciones que prestan apoyo a las personas sin hogar, también pueden derivar o transportar a las personas que necesitan ayuda a otros alojamientos o servicios, según sea necesario. "El objetivo de nuestra intervención no es sólo proporcionar bienes básicos como alimentos y productos de abrigo o higiene, sino también trabajar por la inclusión social de las personas sin hogar", afirma Raquel Zafra, responsable del programa en Alcalá de Henares. "Nuestro fin es siempre que las personas acudan a diferentes espacios donde podamos prestarles un apoyo más profundo en forma de atención social, seguimiento y acompañamiento, información y orientación, mediación o actividades formativas", subraya Zafra. A través de las Unidades de Emergencia Social, Cruz Roja Española atendió a más de 18.000 personas en 2022.

Leer más