Venezuela

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Nota de prensa

La Alianza por la Amazonía de la Cruz Roja tiene como fin salvaguardar vidas y reforzar la resiliencia comunitaria

Panamá/Ginebra, 16 de diciembre - En respuesta a las crecientes amenazas que plantean la crisis climática, el aumento de los desastres y la pérdida de biodiversidad, la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (IFRC) ha anunciado la reactivación de su programa por la Amazonía, la Alianza de la Cruz Roja por la Amazonía. Esta iniciativa, que une inicialmente a las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador y Venezuela, tiene como objetivo mejorar la resiliencia de las comunidades y apoyar a las personas afectadas por los impactos climáticos en la selva del Amazonas.La presencia local y el alcance mundial de la Cruz Roja la convierten en un socio clave para la protección de las comunidades y los ecosistemas amazónicos. Con filiales y personal voluntario en los nueve países amazónicos, la Cruz Roja combina un profundo conocimiento local con experiencia en reducción de riesgos, resiliencia climática y operaciones humanitarias para hacer frente a las crecientes necesidades de la región. La Amazonía, hogar del 10% de todas las especies conocidas y responsable de generar el 20% del oxígeno del mundo, se acerca a un punto de inflexión. La deforestación, los incendios forestales y las actividades extractivas, agravadas por fenómenos climáticos extremos como inundaciones, incendios y sequías prolongadas, amenazan la vida y los medios de subsistencia de más de 40 millones de personas, incluidos 350 grupos de pueblos indígenas. “En el corazón de nuestra propuesta está la convergencia del conocimiento indígena, la experiencia de la Cruz Roja y los avances tecnológicos y de investigación. Esta fórmula, implementada en estrecha coordinación con los Estados, los pueblos indígenas y otras partes interesadas, maximizará los esfuerzos para fortalecer la resiliencia de las comunidades y anticipar y responder a las crisis que afectan a las poblaciones amazónicas”, dijo Xavier Castellanos, Secretario General Adjunto de la IFRC, Desarrollo de Sociedades Nacionales y Coordinación de Operaciones. La Alianza de la Cruz Roja por la Amazonía se centra en la gestión del riesgo de desastres y la resiliencia climática, la salud comunitaria, los medios de vida sostenibles y la respuesta a los desastres y el desplazamiento climático. Armonizar, maximizar y racionalizar el trabajo de la Cruz Roja en estas áreas ayudará a anticipar y reducir el impacto de los peligros que podrían verse exacerbados por la crisis climática en los próximos años. Sólo entre enero y agosto de este año, los incendios destruyeron 62.268 kilómetros cuadrados de la Amazonía, una superficie doce veces mayor que la ciudad de Londres. Esta devastación, agravada por una sequía histórica, ha afectado gravemente al acceso a la salud y a la alimentación y ha aumentado el riesgo de desplazamientos inducidos por el clima. Ante estos escenarios de crisis múltiples, la Cruz Roja ya está trabajando en varias comunidades en el Amazonas. En Ecuador, el voluntariado trabaja con los pueblos indígenas en la aplicación de técnicas agrícolas que reducen el riesgo de sequías, contribuyendo a la diversificación de los ingresos y a la restauración de los ecosistemas para mejorar la seguridad alimentaria y económica. En Colombia, la Cruz Roja proporciona asistencia de salud y acceso a medicamentos en zonas remotas y de difícil acceso. La Alianza de la Cruz Roja por la Amazonía se basa en una sólida experiencia. Las Sociedades de la Cruz Roja de los países amazónicos han colaborado con más de 53 comunidades amazónicas para promover la salud comunitaria y reducir el riesgo de desastres. Este nuevo esfuerzo busca ampliar estos éxitos al mismo tiempo que se alinea con la experiencia global de la IFRC en resiliencia climática y gestión de desastres. Para más información y para solicitar una entrevista, póngase en contacto con: [email protected]   En Panamá: Susana Arroyo Barrantes +50769993199  En Ginebra: Tommaso Della Longa +41797084367                       Hannah Copeland +41762369109 

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Artículo

Huracán Beryl: Para las islas más afectadas, la preparación dio sus frutos con una rápida respuesta. Pero la recuperación se complica por los daños generalizados.

Mucho antes de que el huracán Beryl tocara tierra en las islas caribeñas de Jamaica, Granada y San Vicente y las Granadinas, el voluntariado de la Cruz Roja, las autoridades locales y la población habían trabajado duro para prepararse para lo peor.Anticipándose a los bloqueos de carreteras, los cortes de electricidad y la escasez de agua potable y alimentos, los equipos de la Cruz Roja estaban preparando paquetes de socorro y trasladando suministros lo más cerca posible de los lugares con más probabilidades de necesitarlos después de la tormenta.Cuando el huracán Beryl tocó tierra en Granada, San Vicente y las Granadinas y Barbados, estaba clasificado como huracán de categoría 4. Los fuertes vientos derribaron árboles y tendidos eléctricos. Los fuertes vientos derribaron árboles y tendidos eléctricos, arrancaron tejados enteros de las casas y, en algunos casos, volaron edificios completamente de sus cimientos.En las islas de Carriacou y Petite Martinique, más del 95% de las viviendas resultaron dañadas o destruidas, según las estimaciones oficiales. Las fotos aéreas mostraron grandes franjas de destrucción donde antes había barrios. La tormenta tampoco perdonó a las instalaciones sanitarias, los edificios aeroportuarios, las escuelas o las gasolineras.Cuando el huracán Beryl llegó a Jamaica, causó grandes daños en toda la isla. Las carreteras quedaron bloqueadas por árboles caídos, tendidos eléctricos derribados y deslizamientos de tierra, mientras que los cortes de electricidad y los daños estructurales en importantes instalaciones públicas dificultaron los esfuerzos de respuesta."Este es el huracán más fuerte que ha azotado Jamaica en casi 17 años, desde el huracán Dean en 2007", dijo Rhea Pierre, responsable de desastres de la IFRC para el Caribe de habla inglesa y neerlandesa.En todas las islas, las labores de socorro y rescate se complicaron por la persistencia del mal tiempo, los cortes de electricidad, los bloqueos de carreteras y los daños en las infraestructuras. En muchos casos, las zonas más afectadas también quedaron aisladas de los servicios básicos.Gracias a las alertas de tormenta, miles de personas se refugiaron en lugares seguros. Pero la tormenta también se cobró vidas. Las autoridades han confirmado hasta ahora al menos 15 muertes: cinco en Granada, cinco en San Vicente y las Granadinas, dos en Jamaica y tres en Venezuela. Pero la cifra podría aumentar a medida que continúe la evaluación.La preparación dio frutosA pesar de los daños, el trabajo previo dio sus frutos. Tras el paso del huracán, los equipos de personas voluntarias estaban listos para actuar, visitando las comunidades más afectadas y evaluando detalladamente las necesidades de la gente. Repartieron suministros, ofrecieron primeros auxilios y escucharon a las personas que se enfrentaban a sus pérdidas."Estamos distribuyendo lonas y bidones, así como cintas de limpieza y alimentos para las familias afectadas por el huracán", explica Zoyer John, voluntaria de la Cruz Roja de Granada, frente a una casa gravemente dañada."La mayor parte de los daños en nuestro estado triinsular se produjeron en las islas de Carriacou y Petite Martinique. Pero aquí en la isla principal, en el norte de la isla, mucha gente también se vio afectada".En Jamaica, el personal voluntario de la Cruz Roja también estuvo sobre el terreno realizando evaluaciones rápidas y distribuyendo suministros que habían preparado al principio de la temporada de huracanes. A medida que se acercaba el huracán, esas reservas se trasladaron a almacenes seguros cerca de los lugares donde se preveía que el impacto sería más fuerte.Todo este trabajo anticipado se vio reforzado por una asignación de 1,7 millones de francos suizos del Fondo de Emergencia para la Respuesta a Desastres de la IFRC (IFRC-DREF), basada en las necesidades previstas de las personas en la trayectoria de la tormenta. Este desembolso anticipado significó que las comunidades podían contar con ayuda de emergencia sin tener que esperar a la recaudación de fondos después de la tormenta.En los días posteriores al huracán, la IFRC también lanzó un llamamiento de emergencia de 4 millones de francos suizos para prestar asistencia humanitaria inmediata, protección y apoyo a la recuperación de las familias más afectadas. La operación prestará apoyo a 25.000 personas (5.000 hogares) durante un año.En los primeros días, la atención se centrará en la distribución de artículos de socorro y soluciones de refugio a corto plazo que cubran las necesidades inmediatas de las personas. Con el tiempo, sin embargo, el plan es llevar a cabo también intervenciones que ayuden a las personas a garantizar el acceso a un refugio digno y seguro -centrándose en reconstruir mejor-, así como el suministro de asistencia en efectivo y cupones para bienes específicos.También se prestarán distintos apoyos para restablecer los medios de subsistencia. Debido al impacto de la tormenta en las infraestructuras, muchas personas de las islas se han quedado sin ingresos. En Barbados, la industria pesquera y los pequeños empresarios de las costas meridionales se vieron muy afectados por las marejadas de la tormenta, que causaron daños generalizados.También se prevén intervenciones sanitarias para prevenir la transmisión de enfermedades infecciosas. Las Sociedades Nacionales se centrarán en apoyar las necesidades de higiene de la población, así como de agua potable, principalmente mediante la entrega de equipos domésticos para el tratamiento del agua.Más tormentas por venirEn las mentes de todas las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja de la región está el hecho de que la temporada de huracanes acaba de comenzar. Esta es una de las razones por las que el llamamiento de emergencia también apoya intervenciones destinadas a reducir la vulnerabilidad de las personas a futuros desastres y a mejorar la respuesta comunitaria a los desastres.Una semana después del paso del huracán Beryl, la población local debe intentar rehacer su vida y, al mismo tiempo, prepararse para lo que pueda venir después.Esta es la nueva realidad a la que se enfrentan las pequeñas naciones insulares del Caribe, ya que las temperaturas del agua más altas de lo normal en el sur del Atlántico y el Caribe actúan como combustible para las tormentas, haciendo que se intensifiquen rápidamente hasta convertirse en grandes huracanes. Esto da a las comunidades menos tiempo entre tormentas para recuperarse y prepararse."Este tipo de eventos ya no se producen una sola vez y esto demuestra la necesidad de que los actores locales lideren la preparación y la acción anticipatoria", añadió Rhea Pierre, responsable de desastres de la IFRC para el Caribe de habla inglesa y neerlandesa. "Estamos viendo ese tipo de preparación en acción ahora mismo".

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Artículo

Actualización sobre Cruz Roja Venezolana

La IFRC está al tanto de la decisión de la Corte Suprema de Justicia de Venezuela sobre la reorganización de la dirección y la junta directiva de la Cruz Roja Venezolana, entre otros asuntos. La IFRC envió esta semana funcionarios de alto nivel a Caracas para, junto a nuestra delegación permanente en el país, abordar los acontecimientos en curso. El objetivo es comprender mejor el alcance de los riesgos y la viabilidad para seguir prestando servicios humanitarios neutrales, imparciales e independientes, así como los términos de una futura participación del Estado, de darse el caso. Nuestra prioridad es proteger el papel fundamental de la Cruz Roja Venezolana y de su voluntariado y personal en el país: su acción humanitaria neutral, imparcial e independiente es esencial para salvar vidas. Seguiremos monitoreando de cerca la situación, evaluando el mejor camino a seguir, e informaremos sobre nuestros próximos pasos con base en ese análisis. Cualquier intervención estatal en nuestras Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja suscita serias preocupaciones sobre su independencia y labor humanitaria basada en losPrincipios Fundamentales, y será tratada con la máxima importancia. La IFRC cuenta con mecanismos para gestionar situaciones en las que podría considerarse que una Sociedad Nacional miembro infringe nuestros Principios Fundamentales; y alentamos a los estados a que faciliten su implementación para hacer frente a tales situaciones.

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Discurso

Declaración del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en la Conferencia Internacional de Solidaridad con los Refugiados y Migrantes Venezolanos

Excelencias, Señoras y Señores, El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja acoge con beneplácito la Conferencia Internacional de Solidaridad con los Refugiados y Migrantes Venezolanos y sus Países y Comunidades de Acogida, organizada conjuntamente por el Gobierno de Canadá y la Comisión Europea. El mayor movimiento de población en la historia reciente de la región de las Américas sigue siendo una crisis humanitaria trágica e insuficientemente financiada. El año pasado fui testigo de las condiciones a las que se enfrentan los migrantes en la ruta a través de Centroamérica y México. Las historias que escuché de las personas que hicieron este viaje eran de un sufrimiento y un horror inimaginables. Eran historias de explotación, abusos, separación y pérdida de contacto con sus seres queridos y, para demasiados, de muerte. El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja -las Sociedades Nacionales, la IFRC y el CICR- trabaja con y para las personas que se desplazan, independientemente de su condición, tratando de mejorar su protección y su acceso a servicios esenciales y asistencia humanitaria, en sus países de origen, tránsito y destino en más de 17 países de toda América. Nuestra experiencia, alcance local y análisis nos indican que, a pesar de nuestros esfuerzos con múltiples partes interesadas, los migrantes siguen enfrentándose a un rastro de necesidades insatisfechas, incluidas barreras para acceder a la asistencia humanitaria esencial y a la protección. Nuestro imperativo humanitario nos exige garantizar que nadie se quede atrás. Debemos buscar soluciones comunes a largo plazo e invertir para atender las necesidades de las personas que se desplazan en Venezuela y en toda la región de las Américas. Para ello, debemos trabajar juntos para garantizar lo siguiente: En primer lugar, creemos que las políticas nacionales deben estar alineadas con las prácticas nacionales que favorecen la inclusión social y la no discriminación. La prioridad debe ser siempre prevenir y abordar la separación de las familias. Segundo: Creemos que los migrantes deben tener garantizado el acceso a la asistencia humanitaria, a los servicios esenciales, a la información, a la justicia y a la protección en el respeto de sus derechos, independientemente de su estatus. Los Puntos de Servicio Humanitario de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja -estratégicamente situados a lo largo de las rutas migratorias clave- prestan servicios de protección y de salvamento que atienden las necesidades de los migrantes y absorben las carencias críticas de los servicios públicos. Inviertan en ellos, apoyen a los migrantes para que accedan a ellos. Tercero: Reconocemos que los gobiernos tienen la responsabilidad de facilitar la labor de los agentes humanitarios que prestan un apoyo basado en principios a los migrantes que viajan por rutas peligrosas. Los actores locales y nacionales, incluidas las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, desempeñan un papel fundamental en el apoyo a los migrantes en situaciones vulnerables. Individualmente y en conjunto, los componentes del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja están dispuestos a prestar asistencia humanitaria y protección a los migrantes en situaciones más vulnerables y a las comunidades de acogida, manteniendo la respuesta tan local como sea posible y tan global como sea necesario, y siempre en coordinación con los Estados. Muchas gracias.

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Sociedad nacional

Sociedad Venezolana de la Cruz Roja

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Artículo

Encuesta revela que solo la mitad de las personas refugiadas y migrantes de Venezuela se sienten informadas

Una encuesta regional para comprender las necesidades de información y comunicación de las personas refugiadas y migrantes de Venezuela reveló que la mitad de ellas sienten que no tienen suficiente información sobre sus derechos y sobre dónde encontrar la asistencia disponible. El estudio fue realizado por más de 30 organizaciones en América Latina y el Caribe, en el marco de la Plataforma Regional de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V).Los países de América Latina y el Caribe acogen a unos 3,9 millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela. Ante el aumento de estas cifras, y con necesidades crecientes y recursos limitados, las organizaciones humanitarias han aunado esfuerzos para comprender las necesidades, y al mismo tiempo apoyar los procesos de adaptación, que ponen a las personas en el centro de la respuesta.El estudio pretende comprender cuáles son las preferencias y hábitos de comunicación de quienes se desplazan, para definir la mejor manera de llegar a las personas necesitadas y brindarles información sobre sus derechos y la asistencia disponible.Según se evidenció en la encuesta, los principales canales de comunicación y fuentes de información para las personas refugiadas y migrantes de Venezuela son WhatsApp y Facebook. Además, la comunicación cara a cara con familiares, amigos/as y actores humanitarios es considerada una de las fuentes de información más confiables, especialmente por quienes se encuentran en tránsito.“Hay mucha información en las redes sociales, pero es incorrecta o inexacta. Nos gustaría recibir información a través de las redes, pero de fuentes confiables; información fidedigna y precisa”, dijo una mujer que participó en la encuesta en Perú.Mientras que alrededor del 70 por ciento de los entrevistados dijo que tiene acceso a la información y a un teléfono celular, un número considerable - el 30 por ciento - no tiene acceso a un teléfono celular para comunicarse con amigos/as y familiares o para buscar información, con diferencias entre los países y dependiendo de si las personas están en tránsito o en su destino final.Implementar mecanismos de comunicación sólidos e inclusivos, incluyendo el establecimiento de sistemas de retroalimentación y rendición de cuentas, es determinante para que información puntual y potencialmente vital se pueda compartir en los canales de comunicación preferidos, ayudando a las personas a tomar decisiones en cualquier etapa de su viaje. La confianza, la disponibilidad y la inclusión son criterios que se deben considerar para definir el enfoque correcto para establecer dichos mecanismos de comunicación.Se necesita un mayor involucramiento y participación de las comunidades de personas refugiadas, migrantes y de acogida en todas las intervenciones que afectan sus vidas para garantizar que la asistencia responda a necesidades y prioridades reales.El ejercicio fue liderado conjuntamente por ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, y IFRC, la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, como parte del Grupo de Trabajo de Comunicación con las Comunidades/Comunicación para el Desarrollo de la Plataforma Regional R4V, co-facilitado por UNICEF, en coordinación con las estructuras interagenciales regionales y nacionales.El informe está disponible aquí (link)Para más información sobre este tema, por favor contactar:Diana Medina, IFRC, [email protected], +507 6780 5395Olga Sarrado, ACNUR, [email protected], +507 6640 0185

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Nota de prensa

Venezuela: Nuevo envío de materiales de salud de la Cruz Roja llega a Caracas procedente de Italia

Caracas/Panamá/Ginebra/Roma, 31 de julio de 2019 - El presidente de la Cruz Roja Venezolana, Dr. Mario Villarroel, ha confirmado que esta mañana llegó al aeropuerto internacional de Caracas un cargamento de 34 toneladas de medicamentos y suministros médicos procedentes de Italia.Esta carga fue enviada por la Cruz Roja Italiana, con el apoyo del Ministerio de Asuntos Exteriores italiano y de donantes privados: se trata de una donación en especie de 3 millones de euros a la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR), destinados al llamamiento de emergencia de 50 millones de francos suizos cuyo objetivo es hacer llegar una serie de servicios de salud a 650.000 personas en Venezuela durante 12 meses.El cargamento que llegó hoy incluye medicamentos esenciales como antibióticos y antiinflamatorios, productos sanitarios desechables y una serie de equipos médicos como desfibriladores.El plan de asistencia de la Federación Internacional se centra en prestar apoyo a los centros de salud venezolanos, incluida la red de salud de la Cruz Roja Venezolana, con medicamentos y equipo. El plan también garantizará que los hospitales y clínicas que reciben apoyo tengan acceso a agua potable y saneamiento eficaz.Francesco Rocca, Presidente de la FICR y de la Cruz Roja Italiana, dijo: “Este envío nos permitirá ampliar nuestras operaciones, aumentar nuestro apoyo a las instalaciones sanitarias venezolanas y garantizar que las personas vulnerables puedan acceder a este apoyo tan necesario". "Sabemos que este envío no satisfará todas las necesidades del país: pedimos a todos los socios y donantes que apoyen nuestro llamamiento para aliviar el sufrimiento de los venezolanos. Agradezco al Ministerio de Asuntos Exteriores italiano y a los donantes italianos que nos apoyaron en este nuevo envío".El Dr. Mario Villarroel, Presidente de la Cruz Roja Venezolana, dijo: "La ayuda humanitaria salva vidas y la Cruz Roja Venezolana busca apoyar las necesidades de salud del país. Este es el apoyo a las personas más necesitadas, que siempre ha sido el espíritu de nuestro trabajo humanitario".

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Nota de prensa

La FICR traerá ayuda humanitaria a Venezuela

Caracas/Panamá/Ginebra, 29 de marzo de 2019- El Presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) ha anunciado que la FICR tendrá acceso irrestricto a la ayuda humanitaria en Venezuela para apoyar una importante ampliación de la atención médica y otra asistencia de la Cruz Roja Venezolana.El anuncio se produce tras una serie de reuniones esta semana en la capital venezolana, Caracas, con instituciones y grupos humanitarios, sociales y políticos.En una conferencia de prensa en Caracas, el Presidente de la FICR, Francesco Rocca, dijo:"La Federación Internacional podrá ampliar las actividades de salud en todo el país de manera independiente, neutral, imparcial y sin trabas, llegando a las personas más vulnerables"."En un país desgarrado por la lucha entre poderes, el poder de la humanidad ha prevalecido. Este es un paso crucial en la expansión de los servicios humanitarios en Venezuela, con un enfoque específico en la salud, salvando más vidas y aliviando el sufrimiento de las personas vulnerables que se enfrentan a una situación desesperada".Con el apoyo de la FICR, la Cruz Roja Venezolana dirige actualmente una red de 8 hospitales y 33 centros ambulatorios. También ofrece exámenes médicos comunitarios, consultas y programas de prevención de enfermedades e higiene.  La Cruz Roja Venezolana cuenta con más de 2.600 voluntarios que trabajan en todo el país, entre ellos 500 que prestan primeros auxilios."A medida que ampliamos nuestras operaciones, podemos contar con el compromiso de los voluntarios de la Cruz Roja Venezolana para llegar a las personas necesitadas, quienesquiera que sean y dondequiera que estén, con la atención de la salud como prioridad", dijo el Sr. Rocca.

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Nota de prensa

La FICR traerá ayuda humanitaria a Venezuela

Caracas/Panamá/Ginebra, 29 de marzo de 2019- El Presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) ha anunciado que la FICR tendrá acceso irrestricto a la ayuda humanitaria en Venezuela para apoyar una importante ampliación de la atención médica y otra asistencia de la Cruz Roja Venezolana.El anuncio se produce tras una serie de reuniones esta semana en la capital venezolana, Caracas, con instituciones y grupos humanitarios, sociales y políticos.En una conferencia de prensa en Caracas, el Presidente de la FICR, Francesco Rocca, dijo:"La Federación Internacional podrá ampliar las actividades de salud en todo el país de manera independiente, neutral, imparcial y sin trabas, llegando a las personas más vulnerables"."En un país desgarrado por la lucha entre poderes, el poder de la humanidad ha prevalecido. Este es un paso crucial en la expansión de los servicios humanitarios en Venezuela, con un enfoque específico en la salud, salvando más vidas y aliviando el sufrimiento de las personas vulnerables que se enfrentan a una situación desesperada".Con el apoyo de la FICR, la Cruz Roja Venezolana dirige actualmente una red de 8 hospitales y 33 centros ambulatorios. También ofrece exámenes médicos comunitarios, consultas y programas de prevención de enfermedades e higiene.  La Cruz Roja Venezolana cuenta con más de 2.600 voluntarios que trabajan en todo el país, entre ellos 500 que prestan primeros auxilios."A medida que ampliamos nuestras operaciones, podemos contar con el compromiso de los voluntarios de la Cruz Roja Venezolana para llegar a las personas necesitadas, quienesquiera que sean y dondequiera que estén, con la atención de la salud como prioridad", dijo el Sr. Rocca.

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Nota de prensa

Venezuela: Health care at core of expanded humanitarian operation

Geneva, 6 March 2019 – In the face of rising humanitarian needs in Venezuela, the International Federation of Red Cross and Red Crescent Societies (IFRC) has announced a significant expansion of its support to the lifesaving activities of the Venezuelan Red Cross. IFRC is now looking to its partners for 13 million Swiss francs for 2019 – close to triple the 4.8 million Swiss francs initially sought at the beginning of 2019. In total, the Red Cross aims to reach 220,000 highly vulnerable people. Announcing the revised plan, IFRC President, Francesco Rocca, said: “Our commitment is to the people of Venezuela. Putting politics to the side, the situation is steadily deteriorating, and many people need our help. “This is a plan that responds to pressing humanitarian needs that our volunteers have independently identified and verified. Health is a key priority for us, and this is why we are strengthening our support to Venezuelan Red Cross health facilities as well as to the work they do in local and vulnerable communities. Our response is built on concrete actions that we know can be delivered in a neutral and impartial manner despite the highly complex situation in the country. We look now to our partners and donors to support us,” said Mr Rocca. This revised plan builds on the work already underway in Venezuela, including during recent demonstrations where Red Cross volunteers provided first aid to people injured. Central to it are efforts to provide a range of critical health services. IFRC Secretary General, Elhadj As Sy, said: “Health needs in Venezuela have been increasing in recent years. There are critical gaps that, through this plan, we aim to address by leveraging the Venezuelan Red Cross’ network of eight hospitals and 33 clinics across the country, as well as its thousands of community volunteers and trained first aiders.” The plan also complements the work that is underway elsewhere across the region to aid and support people seeking humanitarian assistance in neighbouring countries. For example, in Colombia, Red Cross volunteers and staff have supported more than 740,000 Venezuelans with a range of services, including emergency and primary health care, food and nutrition supplies, shelter support and even cash assistance. The UN announced last month that the number of Venezuelans who have left the country since 2015 has climbed to 3.4 million IFRC’s Secretary General, Elhadj As Sy, said: “While we ramp up efforts inside Venezuela, we also continue efforts to support people in need of humanitarian assistance in neighbouring countries. Red Cross volunteers and emergency teams are stationed at border crossings and along roadsides, offering care and support to thousands of people every day. However, these efforts may falter without additional resources,” said Mr Sy.