Mujeres rurales de Guatemala en el corazón de la salud comunitaria
En el oeste de Guatemala, las mujeres rurales son mensajeras que salvan vidas, proporcionando información sanitaria fiable a sus comunidades locales. Escrito por David Quijano, IFRC América.Gladis Gómez viste de morado su Huipil, traje típico del occidente montañoso de Guatemala cuyo tono demuestra su luto, pues hace unos días perdió a un familiar lejano.A pesar de ello, una sonrisa ilumina su rostro, una sonrisa que muchas personas de su comunidad reconocen.Gladis es la Presidenta de un comité local de salud en la comunidad de Xecaracoj. El comité reúne a una docena de mujeres rurales que han recibido formación en temas clave de salud, por parte de la Cruz Roja Guatemalteca. Para que puedan ayudar a promover prácticas saludables en su comunidad.Juntas, las mujeres van de puerta en puerta por su pueblo, compartiendo conocimientos sobre cómo la gente puede prevenir enfermedades comunes y muertes, especialmente entre los niños.Esta labor es vital. Guatemala tiene una de las tasas de desnutrición infantil más altas del mundo, y más de la mitad de la población vive por debajo del umbral de la pobreza. La pandemia de COVID-19 también se cobró un alto precio en el país: 20.000 personas murieron a causa de la enfermedad en 3 años."Hemos difundido los nuevos conocimientos que nos ha dado la Cruz Roja Guatemalteca para informar a hombres, niños y niñas sobre cosas tan sencillas como lavarse las manos, limpiar nuestras casas y nuestras calles; hasta la importancia de la lactancia materna y la nutrición"."Ahora sabemos que los hábitos saludables marcan la diferencia entre tener una comunidad fuerte y sana o seguir llevando a nuestros bebés al hospital", dice Gladis.Juan Poyón, Técnico de Control de Epidemias y Pandemias de la Cruz Roja Guatemalteca, dice que ha aprendido mucho de los comités de salud, como el que dirige Gladis, y ha utilizado los conocimientos locales de las mujeres para orientar y mejorar su apoyo.‘’Identificamos temas clave, por ejemplo, que sus prioridades eran la prevención de la COVID-19 o la desnutrición. Hoy, con los comités ya entrenados, identificamos que las mujeres querían llegar a más personas, de hecho, priorizaron la radio, un kiosco de información o mensajes vía WhatsApp como los mejores canales para compartir sus conocimientos de forma masiva’’, explica Juan.Para compartir aún más estos valiosos conocimientos comunitarios, la Cruz Roja Guatemalteca puso en contacto a los comités de salud dirigidos por mujeres con el Ministerio de Salud, lo que ha abierto los ojos a las autoridades nacionales. Ahora trabajan juntos para mejorar la salud comunitaria en todo el país.Ana Gómez, epidemióloga del Ministerio de Salud de Guatemala, explicó:"Hemos trabajado con la Cruz Roja Guatemalteca para identificar necesidades desde el respeto de la diversidad de las poblaciones. Conocimos y acogimos los puntos de vista de las mujeres para fortalecer la salud comunitaria y en el camino confirmamos que su papel es clave"."Son ellas quienes buscan principalmente los servicios de salud, también tienen un rol fundamental en la educación de quienes van a estar al frente del país. Posicionar a las mujeres significa asegurar el cambio de comportamiento de la familia y de las comunidades, y por ende contribuye a mejorar la salud de Guatemala", comenta Ana.Pasando tiempo con Gladis, está claro que se siente muy orgullosa de su trabajo, y que ella y sus compañeras del comité de salud están contentas de que se escuchen sus voces.Mientras se sienta y teje un nuevo corte -una falda tradicional maya- señala las rayas amarillas que representan la esperanza."Mañana me pondré un huipil amarillo para representar el color de la vida, los rayos del sol y el maíz", dice Gladis."Las mujeres de esta comunidad somos especiales, muy especiales, porque hoy tenemos el conocimiento para proteger la vida".La promoción de los comités locales de salud en Guatemala forma parte del Pilar de Preparación ante Epidemias y Pandemias de nuestra Alianza Programática con la Unión Europea.Hasta la fecha, 1250 familias de la zona rural de Quetzaltenango han recibido asesoramiento sanitario, brindado por los comités locales de salud.La Alianza Programática ayuda a las comunidades a reducir sus riesgos y a estar mejor preparadas para desastres y emergencias de salud. Es implementada por 24 Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja alrededor del mundo, incluyendo Panamá, Guatemala, Honduras, El Salvador y Ecuador en América,La IFRC continuará fortaleciendo las capacidades de las comunidades en Guatemala para prevenir pandemias y epidemias; y alentando a más mujeres a asumir posiciones de liderazgo para que puedan tener un impacto profundo y positivo en el futuro de sus comunidades.