La IFRC está ayudando a coordinar la respuesta de emergencia en Ucrania y los países vecinos, en colaboración con los equipos locales de la Cruz Roja. 

Pedimos 550 millones de francos suizos para ayudar a las Sociedades Nacionales a asistir a más de 12,6 millones de personas necesitadas dentro y fuera de Ucrania. La gente ha huido, dejándolo todo atrás: la mayoría son mujeres, niños, personas mayores y personas con discapacidad. Muchos se encuentran en un limbo, tratando de averiguar cuál será su próximo paso: volver a empezar en un nuevo lugar o regresar a la incertidumbre o posiblemente al peligro.

Seguimos aumentando la capacidad de los equipos de la Cruz Roja y la Media Luna Roja en Ucrania y los países afectados para reforzar la acción humanitaria dirigida localmente.

A través de nuestra delegación en Ucrania y de nuestra Oficina Regional para Europa, la FICR está proporcionando apoyo de emergencia en una serie de áreas técnicas con cientos de despliegues rápidos de experiencia internacional.

Para obtener más información general sobre cómo la IFRC apoya a las Sociedades Nacionales durante una emergencia, visite nuestra página de apoyo a la acción humanitaria local.

Los fondos asignados a la respuesta a Ucrania ya han tenido un impacto inmenso en millones de vidas, proporcionando ayuda para salvar vidas, como alimentos, agua, refugio, suministros de higiene, atención médica, apoyo mental y emocional, y asistencia de emergencia en efectivo a las personas desplazadas.

Estamos en un punto en el que también nos movemos para apoyar a las personas a largo plazo.

La asistencia en efectivo ha sido uno de nuestros principales focos de atención en esta respuesta porque permite a las personas decidir por sí mismas, con dignidad, lo que más necesitan.

Nuestro objetivo es proporcionar apoyo a los que están en mayor riesgo y más necesitados lo antes posible.

Nos preocupa participar en cualquier actividad que pueda afectar a la percepción de nuestra neutralidad. Estamos dialogando con la Cruz Roja Rusa sobre este asunto.

"WeAreTogether" se puso en marcha originalmente en Rusia en 2020, durante la pandemia de COVID-19, con el objetivo principal de ayudar a las personas afectadas, principalmente a las que corren un riesgo especial, entre ellas las personas mayores solteras. La Cruz Roja Rusa se unió a esta iniciativa estableciendo una línea telefónica de asistencia psicológica las 24 horas del día, así como proporcionando a las instituciones médicas el equipo de protección necesario.

La Cruz Roja Rusa (CRR) se centra en proporcionar apoyo humanitario y servicios de salud mental a las familias de los movilizados y a las familias de los militares (especialmente a las que tienen hijos). La dirección de la Cruz Roja Rusa nos ha asegurado que no tiene intención de participar en campañas de apoyo a los militares con equipo militar, ni de contribuir a ellas. Ni en asociación con "WeAreTogether", ni de forma independiente.

Nuestra atención se centra en salvar vidas, lo que significa que las Sociedades Nacionales -incluida la Cruz Roja Rusa- pueden interactuar con los militares, así como ayudar a los civiles, incluidas las familias de los militares. Esto incluye restablecer los vínculos entre los seres queridos perdidos; asegurar el apoyo médico, el transporte y la evacuación de los soldados heridos; gestionar los cuerpos de los que han fallecido; y ayudar a los niños cuyos padres están desplegados a hacer frente al estrés.

Cada Sociedad Nacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja del mundo, incluida la Cruz Roja Rusa, responde allí donde las necesidades son mayores en sus comunidades. Pero para poder ayudar, necesitamos que todas las partes respeten nuestra independencia, neutralidad e imparcialidad y no politicen la prestación de asistencia humanitaria.

Los sistemas de salud están cediendo ante la presión y muchas personas afectadas por la crisis necesitan apoyo de salud mental a largo plazo. Los suministros médicos críticos son cada vez más escasos. La limitada capacidad sanitaria, junto con la falta de agua potable en algunas zonas, está aumentando el riesgo de brotes de enfermedades. Los sistemas de salud de los países vecinos también están luchando con el aumento del número de personas.

La red de la IFRC está proporcionando servicios y suministros sanitarios críticos. Esto incluye la gestión de puestos médicos en la frontera, equipos sanitarios móviles en Ucrania y puestos de primeros auxilios en varios países vecinos. Es esencial que los afectados también reciban un apoyo temprano y constante en materia de salud mental.

La trata se aprovecha de las personas que corren más riesgo, como las mujeres, los niños, los menores no acompañados, los adultos mayores, las personas con discapacidad y los nacionales de terceros países.

Las personas desplazadas durante la crisis corren un alto riesgo porque muchas de ellas tienen un acceso limitado a la protección, la escolarización, los ingresos y otros recursos importantes al estar en constante movimiento.

La Cruz Roja tiene un enfoque multifacético para ayudar a mantener la seguridad de las personas desplazadas. Esto incluye la creación de espacios para que los niños estén seguros y cómodos mientras pueden jugar. Los trabajadores de la Cruz Roja también ayudan a identificar los problemas de protección de los niños y a remitirlos a los servicios apropiados, así como a reconectar a los seres queridos que se han separado durante el conflicto. Todo el personal de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja que participa en la respuesta recibe formación sobre cómo identificar posibles problemas de trata y cómo remitirlos a otras organizaciones para que reciban apoyo adicional.

En Ucrania y en los países vecinos, la Cruz Roja está proporcionando a los supervivientes de la violencia sexual y de género referencias a organizaciones dedicadas a apoyar a los supervivientes. Esta información está disponible para el personal de la Cruz Roja que trabaja sobre el terreno, así como para el personal que presta apoyo a las líneas telefónicas de respuesta para quienes reciben programas de dinero en efectivo. También se han traducido carteles para la prevención del abuso y la explotación sexual en el idioma y el contexto pertinentes de cada país, con los números de teléfono de apoyo correspondientes, y se han colocado para animar a las personas afectadas a buscar ayuda.

Si la Cruz Roja identifica a un superviviente, le conseguimos una derivación segura a una organización que pueda proporcionarle un apoyo específico y que le proporcione apoyo psicosocial.

El apoyo que ofrece la Cruz Roja está disponible para cualquier persona que haya sufrido violencia sexual y de género, independientemente del origen (nacionalidad, raza, religión, etc.) del superviviente o del presunto autor. Nuestra respuesta está guiada únicamente por nuestro mandato humanitario de apoyar las necesidades de los afectados.