Se espera que El Niño agrave aún más la temporada de escasez en Malawi

Malawi Red Cross with a family standing in what's left of their home and fields after floods from Cyclone Freddy washed them away.

La Cruz Roja de Malawi con una familia cuya casa y campos fueron arrasados por las inundaciones del ciclón Freddy en marzo de 2023.

Foto: Anne Wanjiru/IFRC

Mientras las inundaciones provocadas por el fenómeno de El Niño siguen afectando a algunas zonas del Cuerno de África, los países del sur, como Malawi, se enfrentan a un alto riesgo de lluvias tardías y períodos de sequía.

Escrito por Anne Wanjiru

Oficial Senior de Comunicación de la IFRC 

Casi todas las familias de Malawi son agricultoras, una fuente de gran fortaleza para la economía del país. Esto era así hace unas décadas, cuando el país exportaba regularmente productos agrícolas a las naciones vecinas.

Sin embargo, esto significa que la mayoría de las familias también han sido extremadamente vulnerables a las tensiones y crisis climáticas.

"Año tras año, es más difícil obtener buenos rendimientos agrícolas y obtener buenos ingresos", afirma Martha Makaniko, agricultora de la aldea de Chiwalo, en Mulanje. "Ya no dependemos de la regularidad de las condiciones meteorológicas. Antes obtenía ocho sacos de maíz de mi campo. Ahora tengo suerte si consigo dos. He preparado mi tierra esperando las lluvias, pero no tengo dinero para comprar semillas o fertilizantes".

Cuando el ciclón tropical Freddy azotó Malawi en marzo de 2023, Martha vio cómo toda su cosecha era arrasada por las aguas. Como miles de otras familias de agricultores, no sólo perdió sus cosechas.

"Mi casa colapsó", dice Martha, que también está enferma y necesita dinero para asistencia médica. "Me quedé en el refugio varios meses. Me gasté todos los ahorros de mi vida en construir una casa nueva. Esto me ha perjudicado. No comemos nada, solo papilla hecha con mangos crudos".

Martha Makaniko, agricultora de la aldea de Chiwalo, en el sur de Malawi, cuyos cultivos quedaron destruidos por las inundaciones del ciclón Freddy.

Martha Makaniko, agricultora de la aldea de Chiwalo, en el sur de Malawi, cuyos cultivos quedaron destruidos por las inundaciones del ciclón Freddy.

Foto: Anne Wanjiru/IFRC

Fruta hervida y ñames envenenados

La gente no suele hervir la fruta para comer en Malawi, así que las papillas de mango de Martha son un indicio de que muchas familias se están quedando sin opciones. Según el informe del Comité de Evaluación de la Vulnerabilidad del gobierno de Malawi, más de 4,4 millones de personas pasan hambre.

La recesión económica, así como los efectos dominó de la pandemia de COVID-19; y el conflicto entre Rusia y Ucrania han agravado la situación de hambre en Malawi.

En los últimos 18 meses, la moneda de Malawi, el kwacha, se ha devaluado dos veces. Esto ha provocado la inflación en todo, incluidos suministros críticos como semillas y fertilizantes.

A las familias agricultoras les resulta demasiado caro gestionar sus propias granjas y deciden trabajar a destajo en los campos de otros, una alternativa habitual entre las familias de agricultores que también está resultando muy competitiva.

Quienes no pueden encontrar trabajo a destajo, rebuscan ñames silvestres o mangos crudos para hervir y alimentar a sus familias.

Sin embargo, hay una variedad de ñames silvestres que son venenosos, y puede ser difícil distinguirlos. Fani Mayesu perdió recientemente a su marido y a su hijo de 19 años tras consumir ñames silvestres venenosos.

"No sabíamos que eran venenosos", dice con cara de incredulidad. "Mi marido los trajo, yo los preparé y todos comimos. Inmediatamente empezamos a enfermar y a vomitar. Mis otros 5 hijos y yo nos recuperamos, pero mi marido y un hijo no".

La Cruz Roja de Malawi con un agricultor cuya casa fue destruida por las inundaciones que también arrasaron sus cultivos.

La Cruz Roja de Malawi con un agricultor cuya casa fue destruida por las inundaciones que también arrasaron sus cultivos.

Foto: Anne Wanjiru/IFRC

Las primeras oleadas de El Niño

Según los pronósticos, es probable que la situación empeore antes de mejorar. Las agencias meteorológicas internacionales y nacionales afirman que se espera que la próxima estación de lluvias 2023/24 (también conocida como la estación de escasez, cuando disminuyen los suministros de alimentos) en Malawi se vea influida por El Niño. En el pasado, las condiciones de El Niño se han relacionado con un retraso en el inicio de la temporada de lluvias, precipitaciones por debajo de lo normal y periodos de sequía.

En su plan de respuesta para la temporada de escasez, la Cruz Roja de Malawi tratará de dar prioridad a los distritos más afectados. El objetivo es reforzar la capacidad de las comunidades para hacer frente a la inseguridad alimentaria, al tiempo que se mantienen otras actividades de refuerzo de la resiliencia.

"Esperamos no sólo hacer frente a las graves necesidades inmediatas de seguridad alimentaria, sino también responder a las predicciones climáticas mediante intervenciones como la distribución de variedades de semillas de maduración temprana", afirma Prisca Chisala, directora de programas y desarrollo de la Cruz Roja de Malawi. "También planeamos apoyar los cultivos de invierno y fomentar la diversificación de cultivos para adoptar cultivos resistentes a la sequía con el fin de hacer frente a las lagunas en la producción."

Respuesta de la Cruz Roja
El voluntariado de la Cruz Roja de Malawi aporta apoyo en diversas formas: alimentos, transferencias en efectivo y ayuda para reducir los riesgos de futuros fenómenos meteorológicos, entre otras cosas.

El voluntariado de la Cruz Roja de Malawi aporta apoyo en diversas formas: alimentos, transferencias en efectivo y ayuda para reducir los riesgos de futuros fenómenos meteorológicos, entre otras cosas.

Foto: Anne Wanjiru/IFRC

Con el apoyo de la IFRC y de las Sociedades Nacionales asociadas, la Cruz Roja de Malawi necesita más de 3 millones de francos suizos para ayudar a cerca de 100.000 personas a través de acciones como:

  • asistencia alimentaria en forma de transferencias en efectivo, alimentación húmeda en las escuelas y ayuda en especie
  • el fortalecimiento de la resiliencia de las comunidades mediante la promoción de medios de subsistencia y la reducción de riesgos
  • la protección de todos los grupos vulnerables frente a la violencia, la violencia sexual, la explotación, el abuso y el abandono, y garantizar el respeto de los derechos humanos.

"Es fundamental que apoyemos la resiliencia de las familias agricultoras para lograr una cosecha después de esta temporada de lluvias, de lo contrario veremos un aumento significativo de los niveles de hambre", dice John Roche, Jefe de la Delegación del Cluster de la IFRC para Malawi, Zambia y Zimbabue.

"Aquí el tiempo es esencial para evitar un empeoramiento de la situación por las predicciones de El Niño. Sólo una respuesta rápida, eficaz y con suficientes recursos es urgentemente necesaria para mitigar la crisis de los impactos a largo plazo."

 

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