Como muchas ciudades del oeste de Ucrania, el sistema sanitario de Úzhgorod se ha visto desbordado. Situada cerca de la frontera con Hungría y Eslovaquia, la población de la ciudad ha aumentado drásticamente con decenas de miles de personas que buscan refugio.
Para ayudar a satisfacer las crecientes necesidades médicas de los recién llegados y aliviar parte de la presión sobre las instalaciones médicas locales, la Cruz Roja Ucraniana abrió un Centro de Salud temporal en Úzhgorod con el apoyo de la IFRC y la Cruz Roja Finlandesa.
El centro ofrece consulta, tratamiento y medicación gratuitos a las personas que lo necesitan. Está abierto a todos, tanto a los miembros de la comunidad local como a los desplazados internos.
Los especialistas médicos asisten a personas de todas las edades en sus problemas de salud. Hay un farmacéutico que receta medicamentos y un psicólogo disponible para consultas y apoyo psicosocial.
Foto: IFRC/Nora Peter
"Los medicamentos para el corazón y la presión arterial son los que más se recetan. La gente vivió situaciones de estrés y eso afecta a su salud", explica la farmacéutica Olesya Verbovska, que trabaja allí con su hermana gemela Oksana.
"La gente tuvo que salir de casa a toda prisa, así que no pudo llevar su medicación habitual. Están agradecidos de que la Cruz Roja les proporcione los medicamentos gratuitamente".
Foto: IFRC/Nora Peter
Muchos pacientes proceden de refugios temporales. Uno de ellos es Oleksandr Ivanovich, de 72 años, de Luhansk, que se aloja en la escuela local. Vino al Centro de Salud para hacerse un análisis de sangre y una ecografía.
"Lo único que puedo decir es gracias: estoy agradecido a todos los que se preocupan por nosotros".
Foto: IFRC/Nora Peter
Daryna, de 17 años, de Donetsk, visitó el Centro de Salud de la Cruz Roja con su madre, sus abuelos y su hermano menor. Los miembros de su familia tienen muchos problemas de salud, como alergias y dolores de estómago. Se enteraron del centro de salud por otros desplazados de la ciudad.
"Es estupendo tener un hospital como éste que ayuda a gente como nosotros", dijo Daryna.
Foto: IFRC/Nora Peter
Algunos de los miembros del personal médico y de las personas voluntarias que trabajan en el Centro de Salud también se han visto afectados por el conflicto, como la Dra. Nataliia Vasylivna, médico de familia de Donetsk.
"Cuando los pacientes están retraídos, les digo que soy una persona desplazada como ellos. Esto les ayuda a relajarse y a conectar conmigo. Después, hablan más abiertamente de sus problemas", explica.
Atiende entre 15 y 20 pacientes al día. Algunas de las afecciones más comunes que trata son enfermedades cardíacas, hipertensión arterial y reacciones alérgicas.
"Muchos pacientes también muestran signos de estrés crónico y se ponen a llorar en cuanto sienten mi simpatía", añade.
Foto: IFRC/Nora Peter
El centro de salud también ofrece apoyo psicosocial seis días a la semana, tanto para adultos como para niños. Y dos personas voluntarias que se dedican a ello también pueden identificarse con lo que viven los pacientes.
Daria, de Odesa, y Ostap, de Kiev, llegaron a Úzhgorod huyendo del conflicto y empezaron a trabajar como voluntarios para la Cruz Roja. Mientras ayudaban a la gente a superar sus problemas, se conocieron y son pareja desde mayo.
"Nunca nos aburrimos cuando hacemos voluntariado juntos. Trabajar con niños puede ser difícil a veces, pero Ostap siempre está ahí para ayudarme", dijo Daria.
"Daria es una persona extraordinaria, nunca he conocido a nadie como ella. Los dos tenemos un gran deseo de ayudar a los demás, y es mucho más fácil hacerlo con alguien a quien quieres", dijo Ostap.