Voces de la selva: Historias invisibles del Darién

A group of migrants gather for a moment during their trek though the Darién Gap, which hundreds of people of all ages – including children and entire families – cross every day.

Un grupo de personas migrantes se reúne un momento durante su travesía por la selva del Darién, donde cientos de personas de todas las edades -incluyendo menores y familias enteras- cruzan cada día.

Foto: Federico Rios

Una nueva exposición de fotografías cuenta la historia de las personas que arriesgan sus vidas tratando de atravesar la selva del Darién - y la historia de quienes les ayudan a sobrevivir.

La selva del Darién encarna una crisis invisible. Bajo el denso follaje de este  bosque que une a Colombia y Panamá, cientos de miles de personas migrantes caminan arriesgando sus vidas en busca de seguridad y mejores oportunidades. 

Este viaje es uno de los más peligrosos del mundo. Innumerables riesgos aguardan a quienes lo intentan. Y, sin embargo, cientos de miles de personas deciden emprenderlo. Una nueva exposición de fotografías y relatos, producida por la IFRC, con financiación de la Unión Europea, cuenta sus historias, y la de quienes trabajan incansablemente para proporcionar ayuda vital a quienes se desplazan. 

Voces de la selva presenta fotos tomadas por el fotoperiodista Federico Ríos, que viajó por el Darién en 2022 y 2023 en una misión para el New York Times, así como fotos tomadas por el personal de la IFRC y la Cruz Roja en la región. Aquí presentamos una selección de las fotos de la exposición y las historias que hay detrás de ellas...

Escenas como esta, con grandes grupos de personas atrapadas en lo que parece ser un embotellamiento humano, son comunes en puntos como la “Loma de las banderas”, ubicada cerca de la frontera entre Colombia y Panamá.

Escenas como esta, con grandes grupos de personas atrapadas en lo que parece ser un embotellamiento humano, son comunes en puntos como la “Loma de las banderas”, ubicada cerca de la frontera entre Colombia y Panamá.

Foto: Federico Rios

Dejarlo todo para emprender un viaje dentro de la selva

El Darién es una zona remota y sin carreteras que abarca territorio en Panamá y Colombia, y que constituye el único paso posible por tierra entre Sudamérica y Centroamérica. La selva del Darién es tan extraordinaria como inhóspita, ya que abarca más de 100 kilómetros entre pantanos, densos bosques tropicales, ríos caudalosos y montañas. 

En esta imagen, un grupo de personas de Haití camina por las calles de Bajo Chiquito, Panamá, una de las primeras comunidades que la gente alcanza después de cruzar el Darién.

En esta imagen, un grupo de personas de Haití camina por las calles de Bajo Chiquito, Panamá, una de las primeras comunidades que la gente alcanza después de cruzar el Darién.

Foto: Federico Rios

¿Por qué alguien decide cruzar el Darién?

¿Por qué alguien elegiría intentar un viaje tan peligroso? Colapso económico, inestabilidad política, violencia, conflictos, persecución y vías legales limitadas pueden contribuir a esa decisión. Y a menudo, la acumulación de crisis y desafíos fuerzan a las personas a migrar. 

Con cada paso, esta mujer que lleva a un niño a la espalda, se hunde más en el barro, y su lucha por completar la caminata se hace cada vez más desalentadora.

Con cada paso, esta mujer que lleva a un niño a la espalda, se hunde más en el barro, y su lucha por completar la caminata se hace cada vez más desalentadora.

Foto: Federico Rios

Los riesgos en el corazón de la selva

La cruda realidad de la selva del Darién se manifiesta mientras presenciamos a una mujer cargando el peso de su pequeño hijo, mientras camina por un terreno desafiante. El calor y la humedad sofocante incrementan el agotamiento que sienten las miles de personas que transitan por esta área.

Cada gota cuenta

Cruzar el Darién no es cuestión de horas, puede llevar días o incluso semanas, según la época de año. El acceso a alimentos y agua durante el cruce es inexistente, algo que desafía especialmente a las personas que viajan con mínimos insumos. Al no poder depender del agua de arroyos o ríos debido al riesgo de contaminación, es esencial que cada quien cargue sus propios suministros para sostenerse durante el viaje.

En esta imagen, tomada en el corazón de la selva, un grupo de migrantes comparte las últimas gotas de agua en una botella plástica.

En esta imagen, tomada en el corazón de la selva, un grupo de migrantes comparte las últimas gotas de agua en una botella plástica.

Foto: Federico Rios

Enfrentando diversas amenazas

La selva del Darién presenta varias amenazas para quienes la recorren. Entre cruces de ríos desbordados, serpientes venenosas, senderos marcados sólo por las huellas de quienes estuvieron allí antes o clima extremo que puede cambiar en cuestión de minutos.

Luego están las amenazas humanas que, desafortunadamente, no son una excepción: robos, tráfico y trata de personas, violencia física y sexual, entre otras. Entre 2018 y 2023, 258 personas perdieron la vida en el Darién. 

Jheymmi Bastidas atiende el pie herido de su hijastra Hamleisy, ofreciendo consuelo y cuidado después de varios días de caminata. Con una expresión de dolor en su rostro, Hamleisy recibe apoyo de sus hermanas, Adriannys y Hamleisky, quienes permanecen a su lado.

Jheymmi Bastidas atiende el pie herido de su hijastra Hamleisy, ofreciendo consuelo y cuidado después de varios días de caminata. Con una expresión de dolor en su rostro, Hamleisy recibe apoyo de sus hermanas, Adriannys y Hamleisky, quienes permanecen a su lado.

Foto: Federico Rios

Las personas que cruzan la selva están expuestas a picaduras de insectos, infecciones, diarrea, deshidratación, fracturas o lesiones en la piel sin acceso a primeros auxilios antes de llegar al pueblo más cercano. Durante las partes más difíciles de su recorrido, su único consuelo es confiar y apoyarse mutuamente.

Un viaje entre aguas 

El Darién se caracteriza por numerosos ríos, muchos de los cuales atraviesan densas selvas tropicales y terrenos montañosos. Sin embargo, estos representan desafíos significativos para las personas que intentan cruzarlo. Especialmente durante períodos de lluvias intensas y frecuentes entre mayo y diciembre. A medida que los niveles de agua crecen y los ríos se vuelven más poderosos, el riesgo por ahogamiento se vuelve una realidad latente.  

Un grupo de migrantes atraviesa un río mientras se agarran a un cable que les guía y les ayuda a mantener el rumbo a pesar de la corriente.

Un grupo de migrantes atraviesa un río mientras se agarran a un cable que les guía y les ayuda a mantener el rumbo a pesar de la corriente.

Foto: Federico Rios

Al borde de la selva, los mundos se encuentran 

Aunque muchas de las personas que cruzan este recorrido son de Sudamérica, aquí confluyen nacionalidades de todo el mundo. En los últimos años, el número de migrantes que provienen de países como China, India, Bangladés, Afganistán, Camerún y Angola ha incrementado significativamente. Para estas personas, los peligros existentes del Darién se ven agravados por barreras culturales y lingüísticas.

Números sin precedentes

La magnitud de la migración a través del Darién en las últimas décadas no tiene precedentes. En una región con una densidad de población relativamente baja, el paso de más de 500,000 personas de diferentes partes del mundo en 2023 ha traído desafíos adicionales a las comunidades locales: esta cifra es siete veces más grande que la población que reside en esta área.

Debido a que el Darién es un área remota y protegida, los recursos básicos y la infraestructura, como agua limpia y servicios de recolección de desechos, son escasos. Estas consecuencias medio ambientales afectan diariamente tanto a comunidades locales, como grupos de personas migrantes

¿Quiénes son las personas que cruzan el Darién y quiénes están allí para ayudarles?

Las razones para viajar a través de esta selva son tan variadas como las propias personas, ya sea que viajen solas, con la familia o con personas que conocen en el camino. A continuación, algunas de sus historias.

Zidane y su pareja recorrieron cientos de kilómetros en mulas que encontraron por el camino. Cada pueblo por el que pasaban les recordaba los peligros de la selva, donde la gente les advertía de la muerte y de la cruda realidad de que no todos terminan el viaje con vida.

Zidane y su pareja recorrieron cientos de kilómetros en mulas que encontraron por el camino. Cada pueblo por el que pasaban les recordaba los peligros de la selva, donde la gente les advertía de la muerte y de la cruda realidad de que no todos terminan el viaje con vida.

Foto: Ramón Lepage/IFRC

Los múltiples talentos de Zidane

Colombiano de origen, Zidane es una persona polifacética: gestor cultural, productor de cortometrajes, competidor de Red Bull, freestyler, rapero, peluquero y panadero. A pesar de sus vibrantes actividades artísticas, se vio obligado a migrar

"Dejamos mi país porque las cosas no iban bien allí, no había dinero, no había nada. Mi fundación [de raperos] había cumplido su ciclo y pensé que era buena idea irnos. Pero como no tenía pasaporte, decidimos viajar por la selva del Darién". 
 

Navil no quería abandonar su comunidad, pero se vio obligado a hacerlo. Es católico y vivía en una zona de India donde las personas cristianas son una minoría perseguida. Lo golpearon, ridiculizaron y en varias ocasiones lo amenazaron de muerte si no renunciaba a su fe. Abandonar el país se convirtió en la única opción para sentirse seguro.

Navil no quería abandonar su comunidad, pero se vio obligado a hacerlo. Es católico y vivía en una zona de India donde las personas cristianas son una minoría perseguida. Lo golpearon, ridiculizaron y en varias ocasiones lo amenazaron de muerte si no renunciaba a su fe. Abandonar el país se convirtió en la única opción para sentirse seguro.

Foto: Ramón Lepage/IFRC

El pasaporte de Navil 

A Navil* le preguntaron cuál era el objeto más preciado que llevaba siempre consigo. Respondió inmediatamente: su pasaporte. Sin él no habría podido salir de la India, su país de origen, para intentar llegar a Estados Unidos. 

*Nombre ficticio

En la espalda de Karen hay un tatuaje de un corazón. En su interior, un bebé descansa serenamente en brazos de una mujer. Karen explica que esta imagen la representa a ella y a su hijo Dylan, que la inspiró para emprender el recorrido hacia Estados Unidos.

En la espalda de Karen hay un tatuaje de un corazón. En su interior, un bebé descansa serenamente en brazos de una mujer. Karen explica que esta imagen la representa a ella y a su hijo Dylan, que la inspiró para emprender el recorrido hacia Estados Unidos.

Foto: Ramón Lepage/IFRC

El motivo de Karen para no rendirse

El hijo de Karen, Dylan, es su motivación para todo lo que hace en la vida, su razón para no rendirse en los momentos difíciles, sobre todo ahora, cuando se ha enfrentado a momentos de peligro y dolor al cruzar la selva. 

"Atravesar el Darién no es fácil. No se lo recomiendo a nadie. Allí el peligro no son los animales, es encontrarte con personas que te hacen daño, que te roban, que abusan tanto de lo poco que llevas, como de tu físico, tu cuerpo." 

Desde 2018, han acompañado a las personas en movimiento con apoyo psicosocial, atención médica, acceso a agua potable, entre otros servicios. En Colombia, los equipos de la Cruz Roja Colombiana proporcionan información confiable sobre el recorrido y prestan servicios de salud y protección.

Desde 2018, han acompañado a las personas en movimiento con apoyo psicosocial, atención médica, acceso a agua potable, entre otros servicios. En Colombia, los equipos de la Cruz Roja Colombiana proporcionan información confiable sobre el recorrido y prestan servicios de salud y protección.

Foto: Hermanos Corallo

Un signo de esperanza

Para las personas que atraviesan la selva, la Cruz Roja representa un signo de esperanza en medio de un viaje difícil y, a veces, desesperanzador. En Panamá, la IFRC y la Cruz Roja Panameña, con el apoyo de la Unión Europea, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y otros socios, llevan varios años respondiendo a las necesidades de las personas migrantes que cruzan el Darién.

Como hemos apoyado hasta ahora: La respuesta de la Cruz Roja en cifras

Nuestro apoyo durante uno de esos años, en 2023, ilustra las enormes necesidades y el apoyo muy concreto ofrecido por el personal y el voluntariado de la Cruz Roja. En ese año, la Cruz Roja proporcionó a las personas migrantes más de 29,7 millones de litros de agua potable, ofreció más de 20.0200 consultas de atención básica de salud, 2.000 servicios de primeros auxilios y más de 24.500 servicios de atención maternoinfantil.

Además, facilitaron más de 33.000 llamadas internacionales para que la población migrante pudiera comunicarse con sus seres queridos. El personal y el voluntariado también proporcionan información, conexión a Internet para permitir el contacto con los familiares y derivaciones a servicios especializados.

Espacios seguros y neutrales

Una vez que atraviesan la selva, las personas en movimiento pueden acceder a apoyo en los campamentos, donde reciben servicios de protección e información confiable para que continúen su viaje de la forma más segura posible. Las personas también pueden encontrar asistencia en los Puntos de Servicio Humanitario, gestionados por la Cruz Roja Panameña con el apoyo de la IFRC, la Unión Europea y otros socios. 

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